43 rue du Minage, 17000 La Rochelle
La Casa de los Embajadores le abre sus puertas en un entorno elegante y refinado, en el corazón del casco antiguo. Este hotel de cinco estrellas, auténtico emblema del lujo de La Rochelle, se inspira en la historia del embajador Albert Bodard, un hijo de la ciudad, explorador y diplomático. A través de sus numerosas misiones por todo el mundo, desde Asia hasta México, pasando por Etiopía y China, Albert Bodard siempre consideró La Rochelle como su verdadero hogar. Es esta atmósfera de viajes y descubrimientos la que el hotel busca evocar, al tiempo que ofrece a sus huéspedes un entorno de estancia cálido y exótico.
El hotel está instalado en dos edificios históricos, uno que data del siglo XVII y el otro de los años 50. Encontrará 58 habitaciones y suites repartidas entre estos dos edificios, cada una reflejando el espíritu del embajador. Las habitaciones del edificio antiguo revelan un encanto rústico con sus vigas expuestas y sus muros de piedra, mientras que las del edificio moderno ofrecen espacios luminosos y contemporáneos, adornados con amplias ventanas que dan a la ciudad o a los jardines.
Cada habitación y suite dispone de un equipamiento de alta calidad, pensado para ofrecer un confort óptimo. La ropa de cama, cuidadosamente seleccionada, asegura un sueño reparador, mientras que pequeños detalles como alfombras de yoga, bolsas de playa o cafeteras italianas contribuyen a crear una atmósfera de relajación. La decoración, inspirada en los viajes de Albert Bodard, combina materiales naturales con toques de exotismo, con objetos encontrados en los cuatro rincones del mundo. El conjunto crea un ambiente refinado y acogedor, propicio para la relajación.
En la planta baja, los espacios comunes le invitan a relajarse con una bebida en el Bodard Bar, donde la decoración evoca los años 50. Los amantes de los cócteles encontrarán aquí su felicidad, gracias a un menú inspirado en los viajes y sabores del mundo. El bar se abre a un tranquilo patio-jardín, donde podrá disfrutar de las suaves noches de La Rochelle a la sombra de los árboles o al borde de la pequeña piscina poblada de peces y tortugas. En invierno, la gran chimenea de piedra del salón le permitirá calentarse mientras saborea una bebida en un ambiente acogedor.
Para los gourmets, el restaurante Arco ofrece una cocina inventiva y refinada. Los chefs reinterpretan los productos locales añadiendo influencias sudamericanas y asiáticas, creando platos únicos que le llevarán en un verdadero viaje culinario. La sala del restaurante, elegante y cálida, se prolonga en una terraza exterior, ideal para disfrutar de comidas al aire libre.
En cuanto al bienestar, el hotel pone a su disposición un spa inspirado en la naturaleza circundante y los elementos marinos de la costa charentesa. El spa dispone de un hammam, una sauna y una sala de relajación, así como de una piscina exterior rodeada de vegetación exuberante. Se ofrecen masajes y tratamientos con reserva, con productos naturales y técnicas provenientes de los cuatro rincones del mundo. Ya sea que desee un momento de relajación después de un día de visitas o simplemente relajarse al borde de la piscina, todo está diseñado para que se sienta revitalizado.
La Casa de los Embajadores está idealmente situada para descubrir La Rochelle a pie. El viejo puerto, sus callejones bordeados de cafés y restaurantes, así como el mercado cubierto, se encuentran a pocos pasos del hotel. Podrá pasear entre los puestos de productos regionales, degustando ostras frescas o mariscos locales. La proximidad del acuario de La Rochelle, las playas y el puente de la isla de Ré lo convierte en un punto de partida ideal para explorar los alrededores.
Para los amantes de la cultura, La Rochelle no carece de tesoros por descubrir. El Museo del Nuevo Mundo, situado cerca del hotel, le sumergirá en la fascinante historia de los intercambios entre La Rochelle y las Américas. El Museo de Historia Natural, con sus sorprendentes colecciones, deleitará a pequeños y grandes. Si prefiere un paseo al aire libre, diríjase a los parques de la ciudad o explore los pantanos circundantes, donde la naturaleza reina suprema.
Para sus salidas culinarias, tendrá una amplia variedad para elegir. El restaurante Les Flots, situado al borde del puerto, es famoso por sus mariscos y su refinada cocina marina. Para una experiencia más relajada, La Yole de Chris ofrece una cocina inventiva en un ambiente acogedor, manteniéndose fiel a los sabores locales. Los amantes de la alta gastronomía no dejarán de hacer un desvío por Christopher Coutanceau, el famoso restaurante con estrella de La Rochelle, para una experiencia culinaria inolvidable.
La Rochelle también es una ciudad vibrante en términos de eventos culturales. No se pierda las Francofolies, uno de los festivales de música francófona más grandes, que se celebra cada verano y atrae a artistas de renombre. Ya sea para una estancia de descanso o de descubrimientos, La Casa de los Embajadores será un refugio ideal para permitirle disfrutar plenamente de esta fascinante ciudad.
Actividades
General
Servicios
Restauración
Área de piscina y bienestar
Zonas comunes
Entretenimiento
Varios
Desde 117 EUR por noche